Entre aljezares y parameras, cerca de la Junta de los ríos Tajo y Jarama, se extiende la fértil Vega de Aranjuez. Desde tiempos de Felipe II, la abundancia de agua y la formación del Real Sitio han favorecido la creación de un complejo y ejemplar sistema hidráulico para el riego de plantíos, sotos y jardines, y para el acondicionamiento del cauce y de los márgenes del Tajo con fines recreativos, paisajísticos y productivos.

La excursión que se propone, en la que se realizarán tramos en autobús y otros andando, quiere mostrar el rico patrimonio arquitectónico hidráulico existente a lo largo de un pequeño tramo del Tajo, desde el Embocador a las Castañuelas, compuesto por muy variadas tipologías: azudes, canales, embarcaderos, estanques, fuentes, cascadas, norias, etc.

Esta actividad se encuadra dentro de los trabajos de difusión del estudio sobre Arquitectura del Agua en la Comunidad de Madrid, que se está realizando desde la Subdirección General de Arquitectura.